La felicidad de los colaboradores en una empresa tiene efectos positivos en el desempeño laboral, y por este motivo es necesario encontrar las herramientas para descubrir cómo se sienten y cómo motivarlos.
Las estadísticas no mienten: un vendedor que está contento logra ser un 37% más eficiente, tiene menos días de enfermedad, es un 12% más productivo y tiende a permanecer en su puesto de trabajo por más tiempo. Es decir, la felicidad de los colaboradores afecta directamente la capacidad productiva de una empresa.
El primer paso, entonces, es evaluar el nivel de felicidad de los colaboradores. Para ello se recomiendan cuatro estrategias: traducir el lenguaje no verbal, hacer preguntas, incentivar la resolución de conflictos y aumentar la confianza de los colaboradores. Se destaca la importancia del lenguaje corporal como un elemento clave para identificar estados de ánimo, si estudias de manera consciente las pistas no verbales al comunicarte con los colaboradores, podrás distinguir si estos integran el grupo de personas felices o frustradas.
Una vez identificado el grupo que se encuentra descontento, es importante hacer preguntas para reconocer la raíz de dicha frustración. Se debe prestar atención a las pistas del lenguaje no verbal y trabajar junto con los colaboradores para determinar las razones, comprenderlas y buscar caminos para resolverlas. Luego, el siguiente paso es construir confianza con la fuerza laboral tal como señala un estudio de la University of Warwick: “La felicidad del equipo de trabajo es capaz de incrementar la productividad en un 12%”. Para poder lograrlo es importante empoderar e incentivar a los colaboradores, mediante respeto, delegación de obligaciones, mentorías, etc.
Es recomendable que los puestos de liderazgo comprendan la importancia de transmitir que el trabajo que se realiza tiene un sentido y un propósito. Estudios han demostrado que el concepto de “sentido” aplica a toda la vida de los colaboradores y que los mueve a encontrar una conexión con el resto del mundo a través de su trabajo. Las empresas pueden apoyar este proceso desarrollando o viviendo una cultura ética, moral y socialmente responsable, con la cual sus colaboradores puedan conectarse. Para lograrlo, se aconseja seguir estos 3 pasos: discutir de manera frecuente la razón de ser de la organización, dar a los colaboradores señales claras de su contribución a esa razón de ser, y entregarles también una visión del sentido cultural y comunitario que tiene su trabajo. Si los líderes se concentran en comunicar la misión de la compañía y el rol de los colaboradores en el éxito de esa misión, pueden tener un impacto significativo en el nivel de realización de quienes conforman la empresa.
Tener un plan de calidad de vida y bienestar para los colaboradores busca conseguir mejoras cada año. Comienza desde implementar un número de actividades anuales, a través de un cronograma, con fechas especiales, para poder mantener un mejor clima en cada plataforma: regalos de cumpleaños, días de la madre, del padre, etc. Se trata de beneficios adicionales que la empresa entrega a sus colaboradores. Pero no es sólo premiarlos en fechas especiales, también es necesario premiarlos por sus resultados, lo que hará que los colaboradores estén mucho más motivados al sentir el reconocimiento por su desempeño.